El municipio de Valdevacas y Guijar está formado por los núcleos de Valdevacas y El Guijar, como refleja su propio nombre. Tiene el honor de ser “el lugar amado” del Arcipreste de Hita, autor del Libro del Buen Amor, quien lo menciona en sus escritos. Sus topónimos aluden a un valle de vacas y a los guijos, formaciones rocosas de origen glaciar o periglaciar situadas en el valle del arroyo de La Matilla. Se encuentra a 42 km de Segovia y cuenta con 96 habitantes (INE 2021).
Historia y patrimonio
Los hallazgos arqueológicos confirman un origen romano en el municipio. En el paraje de La Palatina, donde se desarrollaban labores agrícolas en El Guijar, se descubrieron mosaicos correspondientes a una villa romana datada entre los siglos III y V d.C., similar a la villa de Aguilafuente. En el Cerro de San Juan, próximo a la villa, se han localizado tumbas visigodas de un posible poblado.
Entre los edificios patrimoniales destacan:
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Iglesia de la Exaltación de la Santa Cruz o de La Soledad (Valdevacas): construida en el siglo XVI sobre un antiguo edificio románico, conserva restos de la construcción original en sus muros y una portada al mediodía, siguiendo el modelo impulsado por la orden de los Jesuitas.
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Ermita románica de San Pedro: situada entre Valdevacas y El Cubillo, en ruinas, del siglo XII.
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Iglesia de Nuestra Señora del Rosario (El Guijar): construida en 1815, con obras interrumpidas durante once años y concluida posteriormente con mampostería y ladrillo.
En la plaza de Valdevacas se encuentra la escultura Puertas de la Ausencia de José Antonio Abella, que refleja la despoblación rural y el abandono temporal de los hogares, invitando a la reflexión sobre la vida en los pequeños municipios.
Naturaleza y entorno
Los dos núcleos están regados por el arroyo de La Matilla, cuyas aguas nacen en la Fuente Blanca, perteneciente al municipio de El Cubillo. Sus calles y parajes transmiten tranquilidad y un aparente aislamiento, ideal para paseos y disfrute de la naturaleza.
Tradición y romerías
Valdevacas y Guijar, junto con Arevalillo de Cega, Arahuetes y El Cubillo, celebran cada verano una romería al refugio de los guardas, situado en el término de Arahuetes. Cada año la organiza uno de los municipios participantes, sirviendo como punto de encuentro y celebrando una merienda-cena acompañada de música.