Edad Moderna en la Comunidad de Villa y Tierra de Pedraza
La Edad Moderna marcó el periodo de mayor esplendor para la Villa de Pedraza y para las tierras que integran su Comunidad. Durante los siglos XVI y XVII, la comarca vivió un notable auge económico gracias al comercio lanero y a las manufacturas textiles, actividades estrechamente vinculadas a la potente cabaña ganadera que caracterizaba la zona desde la Edad Media.
La Villa de Pedraza se consolidó como el centro político, económico y administrativo de la comarca. Desde ella se regulaban los asuntos jurisdiccionales del territorio y se celebraba un mercado semanal que servía como punto de encuentro para artesanos, ganaderos y comerciantes, permitiendo dar salida a los excedentes de producción. Este dinamismo económico favoreció la construcción de palacios y casas señoriales, pertenecientes a la nobleza local y especialmente a los miembros de la corte del Condestable de Castilla, así como a los grandes propietarios ganaderos. Muchos de estos edificios, todavía conservados, son una muestra del prestigio y la prosperidad de la época.
Uno de los episodios históricos más conocidos protagonizados por la Villa de Pedraza tuvo lugar durante el reinado del emperador Carlos V. Tras la firma del Tratado de Madrid el 14 de enero de 1526, el monarca exigió a Francisco I de Francia la entrega de sus dos hijos, Francisco y Enrique, como rehenes para garantizar el cumplimiento del acuerdo. Carlos V encomendó su custodia al III Condestable de Castilla, Íñigo Fernández de Velasco, II duque de Frías y señor de la Villa de Pedraza.
Así, los príncipes franceses fueron trasladados al castillo de Pedraza, donde permanecieron bajo vigilancia hasta su devolución a Francia el 24 de marzo de 1530. Este hecho, aún recordado como uno de los acontecimientos más singulares de la historia local, otorgó a Pedraza una relevancia internacional excepcional.
Durante toda la Edad Moderna, el territorio continuó desarrollándose bajo la influencia de la ganadería, el comercio y la nobleza, conformando gran parte del paisaje urbano y rural que hoy caracteriza a la Comunidad de Villa y Tierra de Pedraza.