Con golpes magistrales de guion, reveses al texto de William Shakespeare que nadie podría esperar, derechazos a su propia historia y revelaciones que terminaron de rematar la empatía de cualquiera de las personas que en la tarde de ayer asistió al Teatro Juan Bravo de la Diputación para presenciar la función de 'Casting Lear', Andrea Jiménez demostró de manera magistral por qué su obra cuenta con el premio Max a la mejor adaptación o versión de obra teatral y al mejor espectáculo teatro de este 2025. Por qué, si de este modo su progenitor quizás pudiese entenderlo mejor al encontrar este texto, su obra, y también Andrea, serían merecedoras de disputar el Torneo de Maestros teatral. Porque, eso sí, con la imprescindible y descomunal actuación -se podría decir improvisación- de Carlos Manuel Díaz, Andrea Jiménez sorprendió al público con un catálogo de recursos escénicos que ni el Big Three juntos sobre una pista. Andrea Jiménez y Carlos Manuel Díaz, Cordelia y Lear, rompieron ayer a los padres que no han sido capaces de serlo y, para terminar de vencer en Segovia, remataron la actuación con un ace al teatro y lo que éste significa, que será difícil olvidar en el Juan Bravo. Por eso el público acabó en pie; como en las tardes épicas de Wimbledon o Roland Garros.